Una ola de calor azota a Estados Unidos y Europa
La ola de calor de las últimas semanas se extiende a toda Europa y parte de América, y está dejando decenas de muertos. Sólo en Holanda han fallecido 200. En Francia 40 y en España, ya van diez.
El viejo continente se asfixia, las altas temperaturas dejan sin fuerzas a la población. En Francia, en la conocida playa de París a orillas del Sena 38 grados. Los más valientes al sol, los más prudentes a la sombra. La mitad del país está en alerta. Han muerto 40 personas. Se pide a los estudiantes de medicina y a médicos jubilados que refuercen urgencias, aquí hace tres años murieron por el calor 15.000 personas.
Polonia, Italia, Alemania, Reino Unido todos con temperaturas alarmantes que no se alcanzaban hace decenas de años. 36 grados en Londres así que lo mejor es refrescarse aunque sea en la fuente de Trafalgar Square. En el zoo francés alimentan a los animales con una bola en la que dentro hay carne, pescado, fruta y verdura.
En España ya son diez los muertos por el calor, hay siete comunidades en alerta máxima por riesgo de fuertes tormentas. El viernes una pequeña tregua, pero para el fin de semana más calor.
La vieja Europa echa humo, se han superado las temperaturas del verano de 2003, el más caluroso del ultimo siglo, y parece que la situación, de momento, sigue.
Las autoridades europeas están adoptando medidas para enfrentar una ola de calor, en un intento por evitar que se repita lo sucedido en 2003, cuando las altas temperaturas causaron la muerte de miles de personas.
Los gobiernos europeos están abriendo “centros de emergencia con aire acondicionado” y han enviado a visitadores sociales a examinar las condiciones de los ancianos, cancelando algunos actos al aire libre.
En Inglaterra, sufrieron el miércoles uno de los días más calurosos de su historia – tanto que el pavimento se derritió el algunas calles, con temperaturas de 37 grados centígrados (99 Fahrenheit). Los viajeros en el tren subterráneo londinense fueron los más afectados. El diario capitalino Evening Standard registró una temperatura de 47 grados centígrados (117 Fahrenheit) en el metro. La temperatura media diurna en julio en el sur de Inglaterra suele oscilar en torno a los 21 grados centígrados (70 Fahrenheit) – pero esa cifra ha sido la nocturna en los últimos días.
¿Cómo explicar este calor? Los científicos estiman que esta ola es parte del proceso global de calentamiento del planeta y de un “desajuste” del clima, que puede traducirse en veranos muy calurosos.
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