Simposio
II. ¿Por qué los autores mexicanos no envían trabajos importantes a las revistas médicas mexicanas? Un comentario breve
II. Why mexican authors do not send important research papers to mexican journals? A brief comment
Raúl Cicero–Sabido
Facultad de Medicina, Unidad de Neumología Alejandro Celis, Hospital General de México, México D. F., México
Un claro ejemplo de la productividad científica de un país son los artículos publicados en revistas de impacto internacional. Esta idea excluye de inmediato los artículos que se publiquen en México. Sin embargo es deseable e importante que en México las revistas médicas y científicas lleguen a tener un nivel internacional. Lograr esto es imposible si los propios autores mexicanos las ignoran y los editores no mejoran sus políticas editoriales. Los comentarios que se anotan son producto de la consulta de referencias sobre el tema y de conversaciones con autores importantes en el campo de la biomedicina. ¿Por qué los autores mexicanos no envían trabajos importantes a las revistas mexicanas?1 Algunas de las razones expuestas por los autores se anotan a continuación.
1. Por temor a no ser citados, particularmente por los mismos autores mexicanos, el llamado efecto Mateo.2
2. Por su muy modesto impacto lo que determina que difícilmente sea citado. Muchos autores de ciencias básicas sólo publican 8% de su producción en México.3
3. Por ser objeto de "antipatía", rechazo a lo nacional.4
4. Por no ser aceptados en revistas que por malinchismo se califican como inferiores.5
5. Porque en el peer review sean eliminados sin mayor explicación.6
6. Quizá lo más importante es la posibilidad de ser juzgados por revisores incompetentes o poco interesados en la literatura nacional, que emiten opiniones equivocadas o fuera del contexto del manuscrito,7–9 inclusive con críticas injustificadas sobre la redacción y gramática de un manuscrito
7. Además los autores temen un juicio sesgado a publicar o a no publicar trabajos procedentes de determinadas instituciones con clara anfipatía,3 por ejemplo en un trabajo sobre bacteriología, el revisor confundió un anaerobio estricto con uno facultativo y emitió una opinión desfavorable, el trabajo se publicó después en otra revista con mayor impacto. En otro ejemplo el revisor alegó que no existían diagnósticos confirmatorios cuando en la metodología se especificaban claramente, lo que implica que no leyó el manuscrito con cuidado. Un ejemplo más, un trabajo sobre diagnóstico y tratamiento de tema quirúrgico el revisor dijo que el trabajo no tenía objetivo, este manuscrito fue publicado en una revista internacional. Aunque teóricamente los autores son desconocidos para el revisor, es relativamente fácil saber quienes son porque la investigación está confinada en México a ciertos grupos. Esto no implica que en las revistas mexicanas no se publiquen excelentes trabajos, infortunadamente pocos. De hecho un buen trabajo, siempre es aceptado en alguna revista con revisores competentes, y uno malo no es publicado en ninguna revista seria, aunque a veces puede colarse y finalmente es descubierto, para incomodidad del editor. Otro problema ocurre cuando el editor confía ciegamente en sus revisores y rara vez valora si su actuación fue correcta o incorrecta. Pocas veces se recurre a un tercero. Así puede publicarse algo francamente malo y rechazarse algo que vale la pena. Los revisores son asesores del editor y no verdugos de los autores.10,11 En ocasiones el editor sólo está de adorno y casi nunca revisa un manuscrito y el Consejo Editorial rara vez interviene. Desde luego la ferocidad de los revisores extranjeros de revistas de prestigio con altos índices de rechazo, no se queda atrás, pero en general el autor difícilmente puede rebatirlos y acepta el fallo por ser justo y con frecuencia los comentarios le sirven para mejorar o bien dejar definitivamente el trabajo en el cementerio de lo intrascendente porque a veces las cosas salen malo su momento ya pasó y así hay que reconocerlo
8. Esto ocurre en otras revistas de los países en vías de desarrollo.
9. Por tener que esperar largo tiempo para obtener una contestación favorable o no.
10. Por tener que esperar aún mucho tiempo más para ver publicado su trabajo.
11. En Artemisa hay en promedio 50 revistas médicas mexicanas y digo en promedio porque muchas aparecen y desaparecen con todo y los manuscritos que van a dar a la isla de los trabajos perdidos.
12. Algunas revistas reciben los manuscritos por entrega manual, sin carta de los autores, para ser considerados, no envían carta de aceptación o rechazo, ni pruebas de imprenta, de tal modo que en caso de que se solicite una aclaración el editor no aclara nada y los autores se quedan frustrados y sin manera de reclamar. En ocasiones el autor no recibe contestación y su manuscrito se pierde.
13. En algunos casos, por fortuna poco frecuentes, existe cierta preferencia por artículos de "investigación" patrocinados por la industria farmacéutica. Lo que implica un conflicto de interés.12,13
Estos comentarios figuran en diferentes cartas anotadas en las referencias consultadas, lo que revela el interés de los autores mexicanos por los manuscritos que envían a revistas nacionales, de otro modo estas comunicaciones no se publicarían.
Estas circunstancias invitan a no publicar en México porque se tiene la impresión de que los artículos no se valoran adecuadamente. Además pocas revistas son consideradas en índices como los que se anotan en el siguiente cuadro:
Índices consultados en México
• CENIDS, Centro Nacional de Información sobre Salud
• ARTEMISA (MEXICO), Disco compacto del CENIDS–34 revistas–sólo 5 con impacto mínimo internacional
• IBLIOMEX SALUD, SSA, UNAM, IMSS
• PERIODICA, Centro de Información Científica y Humanística. UNAM
• IMLA, Index Medicus Latinoamericano en Salud
• LILACS, Literatura Latinoamericana en Salud . BIREME. Sao Pablo. Brasil
• ASE INTERNACIONAL EBSCO
• EMBASE/Excerpta Medica, Amsterdam, Holanda
• ULRICHS', Internacional Periodical Directory NY
• CHEMICAL ABSTRACTS
• CURRENT CONTENTS/LIFE SCIENCES
• INDEX MEDICUS
• SCIENCE CITATION INDEX
Estos índices son considerados por la Coordinación de los Institutos de Salud. Secretaría de Salud, en el documento: Criterios y Procedimientos para Determinar el Ingreso y la Promoción al Sistema Institucional de Investigadores – 2004
Las revistas de acuerdo a su registro son clasificadas por este organismo en los siguientes niveles:
I Las que están en nueve índices internacionales, no en los demás grupos.
En algún índice, Excerpta Médica, Index Medicus, Índice Latinoamericano
II En lista anual de CONACYT 2004 Archives of Medical Research, Salud Mental, Salud Pública de México
III Current Contents del lnstitute for Scientific Information (ISI), FI menor a 3.0:
Archives of Medical Research, Salud Mental, Salud Pública de México, Revista de Investigación Clínica, Revista de Psicología
IV Igual, FI de 3.0 a 5.9, 300 revistas
V Igual, FI de 6.0 o mayor, 100 revistas
De hecho la propia Secretaría de Salud sólo acepta revistas que se encuentren en alguno de estos grupos, siendo el I, donde están las revistas mexicanas que cumplen los requisitos editoriales para ser consideradas como serias, aunque su impacto sea mínimo. Por otra parte esta circunstancia contribuye a que las revistas mexicanas no puedan elevar su nivel sobre la base de que lo que se publica en México es lo que no se pudo publicar en el extranjero o bien lo que ni siquiera se envió al extranjero.
A veces resulta muy difícil publicar en México porque los revisores no conocen el tema, a pesar de lo cual emiten su opinión o tienen un sesgo en contra de determinados temas o investigadores y piensan que si una revista eleva su índice de rechazo va a ser mejor.
Algunos revisores son diligentes en contestar revisiones de revistas extranjeras y negligentes con las mexicanas
En general un artículo requiere dos revisores uno que conozca el tema y otro que valore la metodología estadística, sin embargo en México son pocos los científicos productivos que aceptan ser revisores y que contestan con prontitud, particularmente si son del sexo femenino.14 Y se da el caso de que algunos, que casi no producen, evalúan mejor en comparación con los que si producen, tal vez porque estos últimos están muy ocupados.
Esta actividad no es remunerada y está sujeta al espíritu de colaboración del revisor aunque para él no existan artículos perfectos, se busca que el objetivo, la metodología, los resultados y las conclusiones sean congruentes y haya alguna aportación original.
Aunque difícil de aceptar, es responsabilidad de los autores y los editores que las publicaciones mexicanas eleven su calidad y su FI, tarea difícil de lograr pero no imposible.15,16
Referencias
1. Cicero R. ¿Por qué los investigadores mexicanos se resisten a enviar manuscritos a las revistas mexicanas? Rev Invest Clin (Méx) 2002; 54: 92–93 [
Links ]
2. Gómez–Almaguer D, Ruiz–Argüelles GJ. El efecto Mateo en la medicina mexicana. Bol Med Hosp. Inf Méx 2003: 60: 452–453. [
Links ]
3. Rudomín–S P. Comunicación personal. 2004 [
Links ]
4. Zárate A. El doble estándar (anfipatía) que caracteriza a algunos científicos mexicanos en su actuación como revisores de manuscritos y proyectos de investigación. Ciencia 1999; 30 35–36. [
Links ]
5. Lisker R, Loría A. Los artículos científicos en España 94; 46:167–168 [
Links ]
6. Ruiz–Argüelles GJ. Reflexiones sobre los rechazos de artículos en la Revista de Investigación Clínica. Rev Invest Clín (Méx) 1999; 51:95–96 . [
Links ]
7. Bolaños–Meade J. Carta. Rev Invest Clín (Méx) 2004; 56:410–411. [
Links ]
8. Ruiz Argüelles GJ. Carta al Editor. Rev Invest Clín (Méx) 1994; 46:77 . [
Links ]
9. Cicero R. El SNI y las revistas en español. Rev Invest Clín (Méx) 1994; 46: 348. [
Links ]
10. Tobin MJ. Assessing the performance of a medical journal. J Resp Crit Care Med. 2004: 169:1268–1272. [
Links ]
11 Cicero R. Sobre revisores y revisiones. Rev Invest Clín (Méx) 1994;46:247 [
Links ]
12. Tobin MJ. Conflict of interest in AJRCM. J Resp Crit Care Med. 2004; 167:1161 –1166. [
Links ]
13. Ruiz–Argüelles GJ. Más sobre conflictos de interés. Rev Invest Cli (Méx) 2003; 55:736–737. [
Links ]
14. Kljakovic–Gaspic M, Hren D, Marusic A, Marusic M. Peer review time: How late is late in a small medical journal? Arch Med Res 2003; 34: 439–443. [
Links ]
15. Ponce de León S, Ruiz–Argüelles GJ, Ulloa–Aguirre A. Sobre los editores y los cuerpos editoriales de las revistas médicas. Bol Med Hosp. Infant Mex. 2003; 60:455–456. [
Links ]
16. Tobin MJ. Thirty years of impact factor and the journal. J Resp Crit Care Med 2004: 170:351–352. [
Links ]